Cuidar el huerto en verano
¡Me encanta el verano! Suele ser la época en la que todo adquiere un aspecto exuberante. Es posible que tus plantas ya estén produciendo unos bonitos tomates a la espera de madurar o que ya hayas celebrado tu primera cosecha del año. Quizás también estés viendo las primeras berenjenas salir de sus delicadas flores moradas... ¿Observas cómo crecen los calabacines y se expanden tranquilamente junto con sus hermosas y deliciosas flores? No olvides sentirte orgulloso, ¡tú has dado vida a todas estas maravillosas plantas!
El verano es sin duda un sueño hecho realidad para todo jardinero urbano. Es claramente el momento en que todos nuestros esfuerzos se ven recompensados. ¡Pero no desperdiciemos todo ese trabajo anterior! Ponte las gafas de sol mientras comparto mis 8 mejores consejos para tener éxito en la horticultura de verano.
Cuándo regar las plantas
Esa es una gran pregunta. Permíteme responderte. Depende en gran medida de las variedades que cultives, dado que todas tienen distintas necesidades de riego. Y como todo en la naturaleza, el riego también se basa en la necesidad de mantener el equilibrio: Demasiada agua puede perjudicar a las plantas. Por otro lado, la falta de agua es un aspecto muy problemático. Si a tus plantas les falta agua, podrás observar fácilmente algunos signos: El follaje tenderá a orientarse hacia abajo, las hojas se retraerán sobre sí mismas y su textura será más suave. En ese caso, regar es definitivamente necesario. También puedes hacer algo muy sencillo: introduce el dedo en la tierra. Si notas que no solo está seca en la superficie, sino también a un nivel más profundo, riega. Otro aspecto importante: si la tierra está seca, no añadas nunca agua con fertilizante; opta siempre antes por poco de agua sola y luego riega con abonos si es necesario.
Cómo regar las plantas
Cuando era niño siempre me gustaba rociar con agua cada parte de la planta. Es muy divertido ver todas las gotas de agua que caen de las hojas, ¡y también me encantaba el ruido! ¡Incluso a veces lograba crear un arco iris! Todo eso es muy bonito, pero déjame decirte que ese estilo de riego no es eficiente y puede incluso resultar perjudicial. Hazlo bien: coge tu preciosa regadera básica verde y riega tus plantas por el tallo. Así evitarás desperdiciar agua, asegurándote de que llega realmente a tus macetas o mesas de cultivo. Además, muchas variedades pueden desarrollar enfermedades graves, como moho en el caso de los tomates o el oídio (blanquilla) en el de los calabacines, si riegas las hojas. Confía en mí y riega siempre el tallo, ¡eso hará felices a tus plantas!
¿Cuál es el mejor momento y forma de regar las plantas?
Sin duda, es mejor regar por la mañana temprano o más tarde ya de noche, pero nunca durante el día. A lo largo del día, las temperaturas son más elevadas, provocando que el agua se evapore más rápido, lo que supone un desperdicio de este precioso recurso. Y aunque riegues el tallo, algunas gotitas seguirán cayendo en las hojas. Si el sol es fuerte, estas pequeñas gotas podrían tener efecto lupa sobre las hojas y acabar quemando la planta. Por lo tanto, es preferible regar por la mañana mientras saboreas un buen café o té, o por la noche mientras bebes una deliciosa copa de vino (evita hacerlo al revés, ¿vale?). Disfruta de este tiempo de riego, conviértelo en tu momento de meditación en el jardín y aprovecha para observar de cerca todas tus plantas.
¿Qué agua es la mejor?
El agua de lluvia es, de hecho, el recurso hídrico más orgánico que ofrece la naturaleza. Es gratuita, puede ser abundante en ciertas zonas y también es ligeramente ácida. La cuestión principal es que la mayoría de las variedades de plantas prefieren un PH ligeramente ácido en el suelo para crecer de forma saludable. El agua de lluvia es tu mejor aliada y sin duda puedes recogerla con el barril de lluvia green basics de elho. Con 200 litros de capacidad y la posibilidad de conectarlo a una bajante, es un modo fácil y sostenible de recoger y utilizar agua de lluvia para regar tus plantas sin cal. Además, el producto está fabricado con plástico reciclado y gracias a la energía eólica propia de elho. Claramente, una forma estupenda y ecológica de reutilizar este recurso clave para tus plantas. ¡El agua es el nuevo oro azul!
Cubrir con mantillo tus macetas y mesas de cultivo
Es posible que hayas visto jardineros que cultivan en macetas o contenedores colocando un poco de paja sobre la tierra y te preguntes por qué. No, estos jardineros no son unos bichos raros. Cubrir con mantillo es muy recomendable, dado que ayuda a mantener la humedad del terreno durante el verano, y en invierno lo mantendrá más caliente. De este modo, con el mantillo volverás a ahorrar un poco de la escasa y preciada agua. Además, crearás una barrera natural para impedir que crezcan hierbas silvestres o malas hierbas en tus macetas, y esto es importante porque todo lo que crezca en tus macetas extraerá nutrientes del suelo. Por último, también añade material orgánico al terreno: el mantillo se descompone con el tiempo y devuelve los nutrientes a la tierra. Es algo muy fácil de hacer y altamente beneficioso para tus plantas. Puedes utilizar distintos tipos de mantillo, como hierba cortada, u hojas muertas o paja que podrás adquirir fácilmente en tiendas de animales.
Abonar las plantas en verano
Como hemos indicado en la introducción, en verano tu jardín precisa mucha atención y cuidados. Tras dar sus primeros frutos u hortalizas, tus plantas necesitan muchos nutrientes. Este es un momento clave si buscas disfrutar de plantas duraderas. Si cultivas tomates, berenjenas, pepinos, pimientos rojos, fresas o calabacines, mi consejo personal es abonarlos con un fertilizante con una alta concentración de fósforo. Consulta el estiércol de aves marinas, también llamado guano, que es muy eficaz, aunque también puedes reutilizar las cáscaras de plátano, dado su alto contenido en fósforo. Si te gustan los plátanos, guarda las cáscaras e introdúcelas en la tierra, donde se descompondrán rápidamente y liberarán el fósforo necesario.
Coloca algunas variedades a la sombra
Como recogía en mi artículo anterior, algunas plantas prefieren algo sombra para crecer, especialmente cuando el sol es fuerte y el clima caluroso. La buena noticia es que cuando cultivas en macetas o mesas de cultivo, tu balcón se torna flexible y puedes moverlas de sitio. Si continúas cultivando rábanos, lechugas, acelgas o espinacas, puede ser buena idea disponerlos en una zona de sombra al menos durante la mitad del día. Seguro que agradecerán el descanso a la sombra.
¿Qué puedo plantar en verano?
Lo bueno es que aún puedes plantar muchas cosas. Todavía tienes tiempo de plantar más lechugas, zanahorias y rábanos. También puedes optar por las patatas, que podrás cosechar en unos 4 meses, en la maceta para patatas de green basics. Consulta mi Instagram y aprende a plantar y cosechar patatas. Cosechar patatas es como jugar a la búsqueda del tesoro: ¡te reportará muchas sorpresas!
Te deseo un verano increíble. Estoy convencido de que los consejos anteriores te ayudarán a disfrutar de tu selva verde y de infinidad de frutas y verduras orgánicas y sabrosas.
Que tengas un verano maravilloso, lleno de amor verde.
El Jardinero francés